Ahondando aún más el vacío de la carencia de las voces subalternas y su imposibilidad de audición en los espacios públicos y otras múltiples manifestaciones de tensiones sociales. Amplifiqué una banda sonora elaborada con el registro obtenido en ambas intervenciones previas, al interior de la mina de carbón “El Chiflón del Diablo”, que se adentra 850 metros bajo el nivel del mar, ubicada en la ciudad de Lota, en la provincia de Concepción. Cuya explotación cesó en 1997, ocasionando graves problemas sociales de cesantía y pobreza.
Al término del recorrido programado por el interior de la mina y de la emisión de la banda sonora, un intenso silencio fue neutralizado por el canto de una ballena.