Acceso Controlado es un espectáculo de multimedia que gira alrededor del tema del acceso controlado y la metáfora (y la creciente realidad) de las comunidades enrejadas en Puerto Rico. La pieza se compone de cinco partes, con cinco personajes que Hernández corporeiza con majestuosidad. "La Reina" recita un discurso fascista, clasista y racista, reclamando que la democratización y el mestizaje son crímenes en contra del orden histórico. La guardia de seguridad "Teniente Cortés" habla sobre la paranoia y las falsas "redes de seguridad" a las cuales tornan las personas --"controlar" el acceso a través de las ubicuas comunidades enrejadas siendo una de ellas- para así protegerse del alarmante crecimiento de la criminalidad en Puerto Rico. El público se encara luego con "El Chamaco" en "Primera Plana", una escena que explora el lenguaje corporal y las expresiones de la juventud criminalizada, trayendo a colación la relación entre la voluntad y el sometimiento, la vida criminal en la calle y las fuerzas institucionales que tratan de controlarla. Un cortometraje titulado Milagros Vélez le sigue a esta escena. El filme esta basado en Request Concert (Concierto a Petición) de Franz Xaver Kroetz y Acto sin Palabras de Samuel Beckett. La última pieza, La Primera Dama en Solo Operático en Tiempos de Desafortunados, completa el performance, con una "Primera Dama" histérica que simboliza la banalidad de la queja en una sociedad donde la elite económica controla la expresión cultural y los políticos esconden la corrupción detrás de su hipócrita preocupación cívica.