Mi trabajo se centra principalmente en las historias no contadas de Nueva York (principalmente las historias poli-culturales) y las historias de la generación Hip- Hop. Esto presenta y revela una gran variedad de temas y formas, ya que a la vez que hay muchas comunidades que viven en la ciudad de Nueva York y varias generaciones dentro de la generación Hip-Hop, también hay muchas cuestiones que compartimos entre ellas. Hay también unas estéticas únicas del Hip-Hop que siempre encuentran su camino hacia mi trabajo. Dicho esto, yo sólo soy un artista de teatro contemporáneo. Mi trabajo cae a menudo bajo la designación policultural o Hip-Hop, porque vivo en estas realidades contemporáneas. Yo no las impongo como ideas tardías a mi trabajo, ya que son el centro de mi vida, de mi comunidad y de mi generación. Así pues, en el sentido antiguo, soy un griot, un artista de teatro. Nada que ver con la vanguardia, lo experimental o lo innovador. Excepto que en estos días en los EE.UU., los problemas contemporáneos en el arte son revolucionarios porque la norma es una obsesión con los clásicos y los muertos .
Al también haber crecido como monologuista, me di cuenta de que las historias que quiero contar y la forma en que me gustaría contarlas, requieren una forma a mayor escala. Una forma que los monólogos, aunque conmovedores y eficaces, no necesariamente tienen la capacidad de proveer. Así que estoy empezando a crear obras más grandes con muchos actores y con un trabajo de escenario que ocupa, pues, más espacio, en el escenario, en la mente, etc.
Mi trabajo hasta la fecha ha sido celebrado por mi habilidad de llegarle a diversos públicos jóvenes con una narración contemporánea relevante, no-condescendiente y de calidad, así como mi uso de un lenguaje contemporáneo, y mi enfoque en poner personajes tradicionalmente periféricos en el centro del drama. Mi trabajo teatral en cárceles, escuelas y centros comunitarios, tanto en los EE.UU. como en el extranjero, ha facilitado un diálogo que no se puede lograr en CNN o MTV, y aunque ha sido muy bien acogido donde quiera que vaya, también me ha ganado un lugar especial en el Watch-List del Departamento de Estado de EE.UU. y una carpeta sustanciosa en la Oficina de Seguridad Nacional. Y yo lo que hago es simplemente teatro. ¿Quién sabía que los artistas intérpretes eran tal amenaza en la era del terrorismo? Bueno, supongo que siempre ha sido así.
Mi trabajo se centra principalmente en las historias policulturales no contadas de la ciudad de Nueva York y las historias de la generación Hip-Hop.
Danny Hoch: Solo Performances -1990