Diane Torr investiga las políticas de fluidez de género y de identidad sexual en Las chicas serán chicos serán reinas (1986). Junto a Christina Koenig y Lizzie Olesker, Torr subvierte los binarios de género actuando en el escenario como drag kings—mujeres que incorporan masculinidad y retratan estereotipos de mujeres. Exploran las posibilidades de convertirse en más de un solo género a través de una “metamorfosis de la imaginación sexual”. Llevando trajes de hombres y otros vestuarios, las performers realizan poses pertenecientes a un género específico que deconstruyen roles de género estereotipados ligados a la heterosexualidad. Juntos, estos actos funcionan expandiendo el repertorio de la performatividad del género, desafiando las construcciones socialmente aceptadas del comportamiento de la mujer.
Diane Torr (1948-2017) fue una artista de performance que trabaja en danza, instalación, y formato filme o vídeo. Originaria de Aberdeen, Escocia, Torr desarrolló su carrera artística como un personaje clave de la escena artística del downtown de Nueva York. Autora de una extensa producción, se ha presentado en diversos sitios de la ciudad, incluyendo Franklin Furnace, The Kitchen, Danceteria, y The Mudd Club, entre otros. Torr es profesora invitada de la escuela de arte de Glasgow, en Stockholm University of Arts y en Freie Universität, en Berlín. Su conocido taller Man-for-a-Dar ha sido impartido alrededor del mundo y ocupa un lugar destacado en el documental Venus Boyz (2002). Es co-autora junto a Stephen Bottoms de Sex, Drag, and Male Roles: Investigating Gender as Performance (2010). www.dianetorr.com
El trabajo de Lizzie Olesker explora las complicaciones cotidianas relacionadas al lenguaje, gestualidad, lugar e historia. Sus performances, obras, y creaciones se han llevado a cabo en The Public Theater, New Georges, Ohio Theater, Cherry Lane Theatre, Dixon Place, Clubbed Thumb y Invisible Dog. Además, ha colaborado con Talking Band en varios proyectos tanto como performer y escritora en La MaMa, HERE Arts Center, y en giras con la compañía. Ha sido adjudicada con becas y asignaciones artísticas de Brooklyn Arts Council, Women in the Arts & Media Coalition, Dramatists Guild, y de la New York Foundation for the Arts, realizando también residencias en Blue Mountain Center, Hedgebrook, y Tofte Lake Center. Su proyecto híbrido en conjunto con la realizadora Lynne Sachs, EVERY FOLD MATTERS—sobre el trabajo de hacer la lavandería para otros— fue recientemente presentado en barrios de lavanderías del cual ahora se está haciendo un filme. Sus textos han sido publicados en Brooklyn Rail, Heinemann Press, y en Cherry Lane Anthology of Plays. Olesker enseña dramaturgia en la NYU y The New School, y es una activa miembro del sindicato de profesores adjuntos, UAW Local 7902.
Luego de participar como coristas en las bandas Yo Soy, Yo Soy, The Grace Paris Band y The Wonderfuls en los 80, Christine Koenig fue llamada para el rol de una vocalista femme fatale en The Sleazebuckets’ The Story of Ms. O, en el espacio 8BC. Esta actuación la llevó a colaborar con Diane Torr y Lizzie Olesker en GIRLS WILL BE BOYS WILL BE QUEENS. Posteriormente crearon el trabajo Oedipus in the Mouth of the Dragon, el cual fue presentado en la instancia “Art on the Beach”, en Nueva York. Koenig ha trabajado para la compañía National Black Touring en la producción de Homeland, una obra sobre el apartheid en Sud África. Poco después trabajó con el director John Thorpe en Open Admissions, una obra de un acto donde un joven afroamericano lucha por quedarse en CUNY durante los 60. Koenig trabajó por casi 20 años en Henry Street Settlement y obtuvo el grado de magíster en trabajo social en Hunter College.
Materiales adicionales
Girls Will Be Boys Will Be Queens Performance Proposal